Zinedine Zidane (Marsella, 23 de junio de 1972) está considerado uno de los 10 futbolistas más grandes de todos los tiempos. Su fichaje en 2001 por el Real Madrid, por 76 millones de euros, fue el más caro de la historia hasta la contratación de Crisitiano Ronaldo.
Zidane, un genio del balón
El futbolista francés estaba dotado de una técnica exquisita. Capaz de los más insólitos controles de balón, manejaba ambas piernas con maestría y remataba con potencia y colocación. Jugador elegantísimo, unía a su depurada técnica un físico potente y un regate en carrera desestabilizador. Por si fuera poco, Zidane dominaba también el remate de cabeza, siendo autor de goles memorables de esta suerte, como los dos logrados en la final del Mundial de Francia en 1998 ante Brasil.
Ver jugar a Zidane era una delicia. Incluso los menos aficionados al fútbol intuían que era un futbolista especial y que su juego estaba lleno de detalles artísticos que desataban la admiración incluso de sus rivales.
La galería de recursos técnicos del galo era ilimitada. En la retina de muchos aficionados quedan jugadas increíbles como controles de balón en carrera con la espuela, roulettes y goles de volea como el de la final de la Champions League 2002 en Glasgow, catalogado por la UEFA como el mejor de la historia en una final europea.
Zinedine Zidane, un palmarés envidiable
Zidane debutó a nivel profesional con el AS Cannes en el año 1989. En 1992 fichó por el FC Bordeaux con el que consiguió una Copa Intertoto de la UEFA, su primer título internacional.
En 1996 la Juventus de Turín se hizo con sus servicios y, junto a grandes jugadores como Didier Deschamps, Edgar Davids o Alessandro Del Piero, consiguió dos scudettos, una Supercopa de Europa y una Copa Intercontinental, estos dos últimos trofeos en1996. Con la escuadra italiana jugó dos finales de Champions League en 1997 y 1998, perdiendo ambas frente a Borussia de Dortmund y Real Madrid respectivamente.
Con el club de Concha Espina Zinedine Zidane logró 1 Champions League, 1 Supercopa de Europa y 1 Copa Intercontinental, todas ellas en el año 2002.
Con los bleus, "Zizou" fue campeón de la Copa del Mundo 1998 y de la Eurocopa 2000, siendo fundamental en la consecución de ambos títulos y la referencia de un fútbol francés que, por esa época, era el dominador del panorama futbolístico mundial.
A título personal, Zidane fue galardonado como Balón de Oro en 1998 y 3 veces FIFA World Player en 1998, 2000 y 2003. También fue designado Mejor Jugador de la Copa del Mundo de 2006 y Mejor Jugador Europeo de los últimos 50 años en votación por internet.
En la final del Mundial de Alemania 2006, ante Italia, Zidane fue expulsado por propinar un cabezazo en el pecho a Materazzi, después de que este provocara al francés gravemente.
Zidane y el Real Madrid
El 7 de mayo de 2006 se despedía de la afición madridista en el Santiago Bernabéu frente al Villareal. El público de Chamartín se volcó con el francés rindiéndole tributo de admiración, respeto y cariño por un futbolista que ha dejado huella, tanto a nivel profesional como personal, en el subconsciente merengue. Ese día, "Zizou" marcó un tanto y al finalizar el choque salió al terreno de juego para despedirse entre lágrimas de una afición que por siempre le considerará uno de los suyos.
Zinedine Zidane jugó en el Real Madrid al lado de los mejores futbolistas del mundo por aquel entonces. Luis Figo, Raúl González, Roberto Carlos, Ronaldo, Fernando Hierro, David Beckham o un jovencísimo Iker Casillas, entre otros, formaron una constelación de estrellas que, a pesar de las críticas posteriores, conquistaron títulos internacionales e hicieron del Real Madrid el club referente a nivel mundial de los primeros años del siglo XXI.
En la actualidad el genio francés está ligado a la entidad madridista como asesor del presidente Florentino Pérez y enlace entre Mourinho y los jugadores. Zidane tiene su residencia habitual en Madrid y, tanto él como su familia, están integrados totalmente en la capital de España.
Uno de sus hijos, Enzo, juega en la actualidad en las categorías inferiores del Real Madrid y al parecer la genética le acompaña.
Quién sabe si dentro de unos años tendremos el honor de ver a otro Zidane sobre los terrenos de juego, eso sería una gran noticia para el fútbol.
Zidane, un genio del balón
El futbolista francés estaba dotado de una técnica exquisita. Capaz de los más insólitos controles de balón, manejaba ambas piernas con maestría y remataba con potencia y colocación. Jugador elegantísimo, unía a su depurada técnica un físico potente y un regate en carrera desestabilizador. Por si fuera poco, Zidane dominaba también el remate de cabeza, siendo autor de goles memorables de esta suerte, como los dos logrados en la final del Mundial de Francia en 1998 ante Brasil.
Ver jugar a Zidane era una delicia. Incluso los menos aficionados al fútbol intuían que era un futbolista especial y que su juego estaba lleno de detalles artísticos que desataban la admiración incluso de sus rivales.
La galería de recursos técnicos del galo era ilimitada. En la retina de muchos aficionados quedan jugadas increíbles como controles de balón en carrera con la espuela, roulettes y goles de volea como el de la final de la Champions League 2002 en Glasgow, catalogado por la UEFA como el mejor de la historia en una final europea.
Zinedine Zidane, un palmarés envidiable
Zidane debutó a nivel profesional con el AS Cannes en el año 1989. En 1992 fichó por el FC Bordeaux con el que consiguió una Copa Intertoto de la UEFA, su primer título internacional.
En 1996 la Juventus de Turín se hizo con sus servicios y, junto a grandes jugadores como Didier Deschamps, Edgar Davids o Alessandro Del Piero, consiguió dos scudettos, una Supercopa de Europa y una Copa Intercontinental, estos dos últimos trofeos en1996. Con la escuadra italiana jugó dos finales de Champions League en 1997 y 1998, perdiendo ambas frente a Borussia de Dortmund y Real Madrid respectivamente.
Con el club de Concha Espina Zinedine Zidane logró 1 Champions League, 1 Supercopa de Europa y 1 Copa Intercontinental, todas ellas en el año 2002.
Con los bleus, "Zizou" fue campeón de la Copa del Mundo 1998 y de la Eurocopa 2000, siendo fundamental en la consecución de ambos títulos y la referencia de un fútbol francés que, por esa época, era el dominador del panorama futbolístico mundial.
A título personal, Zidane fue galardonado como Balón de Oro en 1998 y 3 veces FIFA World Player en 1998, 2000 y 2003. También fue designado Mejor Jugador de la Copa del Mundo de 2006 y Mejor Jugador Europeo de los últimos 50 años en votación por internet.
En la final del Mundial de Alemania 2006, ante Italia, Zidane fue expulsado por propinar un cabezazo en el pecho a Materazzi, después de que este provocara al francés gravemente.
Zidane y el Real Madrid
El 7 de mayo de 2006 se despedía de la afición madridista en el Santiago Bernabéu frente al Villareal. El público de Chamartín se volcó con el francés rindiéndole tributo de admiración, respeto y cariño por un futbolista que ha dejado huella, tanto a nivel profesional como personal, en el subconsciente merengue. Ese día, "Zizou" marcó un tanto y al finalizar el choque salió al terreno de juego para despedirse entre lágrimas de una afición que por siempre le considerará uno de los suyos.
Zinedine Zidane jugó en el Real Madrid al lado de los mejores futbolistas del mundo por aquel entonces. Luis Figo, Raúl González, Roberto Carlos, Ronaldo, Fernando Hierro, David Beckham o un jovencísimo Iker Casillas, entre otros, formaron una constelación de estrellas que, a pesar de las críticas posteriores, conquistaron títulos internacionales e hicieron del Real Madrid el club referente a nivel mundial de los primeros años del siglo XXI.
En la actualidad el genio francés está ligado a la entidad madridista como asesor del presidente Florentino Pérez y enlace entre Mourinho y los jugadores. Zidane tiene su residencia habitual en Madrid y, tanto él como su familia, están integrados totalmente en la capital de España.
Uno de sus hijos, Enzo, juega en la actualidad en las categorías inferiores del Real Madrid y al parecer la genética le acompaña.
Quién sabe si dentro de unos años tendremos el honor de ver a otro Zidane sobre los terrenos de juego, eso sería una gran noticia para el fútbol.
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